"La Parábola de Atacama, un mensaje para educar"
Hace mucho tiempo un Maestro contó esta historia…
"En un lugar muy lejano y desértico -llamado Atacama- existían muchos hombres que necesitaban trabajar para alimentar a sus familias. Unas personas les ofrecieron trabajar entre unos cerros; a más de 700 mts de profundidad en una antigua mina.
La mina estaba cansada, llevaba mucho tiempo entregando riquezas desde sus entrañas… tenía más de 100 años, por lo que era bastante peligrosa. Los hombres fueron a trabajar al lugar, no se conocían entre sí, pero los unían dos cosas: la necesidad de trabajar para poder llevar el pan a sus hogares y el permanecer bajo miles de toneladas de piedras y minerales.
Más de un centenar de hombres, trabajaban en la mina, pero sólo 33 se encontraban ahí cuando una parte de ésta se desplomó, quedando atrapados en su interior.
Durante unas horas los dueños de la mina callaron. Pero a las horas todo se supo. No sólo en ese lejano país, sino en el mundo entero. Todos querían estar ahí, ayudar de algun modo, el lugar se pobló de periodistas, quienes comenzaron a narrar lo sucedido en diferentes idiomas, a personas de todo el mundo.
Las autoridades del país, y sus compañeros comenzaron a intentar muchas maneras de liberarlos pero nada resultaba. Pasaron los días, y a medida que pasaban las horas, muchos comenzaron a perder la esperanza de encontrarlos con vida. Salvo sus familias, algo que muchos no tardaron en calificar de iluso. Era difícil que estuvieran vivos todos, tal vez algunos.
Los entendidos en minería comenzaron a perforar el cerro, Hicieron tres agujeros en distintos lugares. EL camino era lento y difícil. Ya habían pasado más de tres semanas
Uno de los agujeros llego a los 750 mts. Pero lejos de donde supuestamente estaban los mineros. La cálculos habían fallado.
Por ello, en los otros agujeros debieron corregir la dirección que llevaban . "NO basta hacer agujeros ó sondajes dijo uno de los rescatistas . Debemos corregir la orientación del rescate.", señalaron los especialistas.
Otro rescatista dijo "no basta un camino de rescate, debemos probar con varios".
A lo cual añadió otro "Ellos están atrapados por los cerros y es muy díficil"
Todo el mundo seguía por TV lo que pasaba en esta mina. Un lugar marginado y perdido entre los cerros se había transformado en el centro del Mundo y literalmente el centro de la Tierra.
Pasaban las horas y el mundo ya se llenaba de angustia, menos sus familias que estaban día y noche a los pies del cerro.
Y un domingo en la mañana –día de la Resurrección- uno de los sondajes recibió golpes y manchas rojas en spray. Son las primeras señales de vida al fondo de la mina.
Y hasta que apareció en una insignificante bolsa de plástico con un mensaje simple y concreto "Estamos bien en el refugio los 33""
Finalmente el Maestro hizo estas preguntas a sus discipulos…
- Los atrapados…¿Quiénes son? ¿Podrían ser nuestros niños y jóvenes?
- ¿Cuáles son las montañas y cerros que atrapan a nuestros jóvenes?… ¿la pobreza? ¿la
- Violencia? ¿la falta de oportunidades?
• ¿Apostamos por la fuerza de la vida?
• ¿Hacemos sondajes? ¿Y tenemos al mismo tiempo varios sondajes?
• ¿Planificamos nuestro sondajes?
• ¿Correjimos las planificaciones del sondaje interpelados por la realidad?
• ¿Entendemos que lo primero del rescate es comunicarnos?
• ¿Rescatamos en Equipo?
• ¿Sabemos esperar el tiempo del rescate?
•¿Asumimos que las familias esperan?
Después de las preguntas, los discípulos se fueron a hacer los rescates que por años tenían pendientes. Pero lo hicieron de una manera totalmente distinta. Entonces, muchos niños y jóvenes comenzaron a dar señales de vida y comenzaron a salir desde el fondo de las montañas de la pobreza, la violencia entre otras.
P.MAURICIO ARANCIBIA PORTILLA
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